Hace muchos años, décadas ya, utilizábamos algo muy sencillo para vincular una licencia uso de software a un hardware: leer el serial de volumen que se aplica de manera aleatoria al formatear un disco duro. Era algo casi que tonto pero la idea provino de la propia empresa Microsoft®, era un secreto a voces que aparte de este «truco» también usaba el serial de la tarjeta de red y la tarjeta madre.